En Barcelona, el pasado 20 de mayo, Lluís Llach, presidente de la Assemblea Nacional Catalana (ANC), ha expresado su preocupación por el rumbo del independentismo catalán, señalando que la reciente elección de Salvador Illa como presidente de la Generalitat es un indicativo de que este movimiento ha llegado a un punto crítico. Según Llach, es imperativo que el independentismo se replantee su estrategia y se organice de nuevo.

Durante una entrevista concedida a 'Vilaweb', Llach describió la atmósfera dentro de la sociedad independentista como una etapa de desánimo y frustración. Manifestó su preocupación por el uso de la ANC como un instrumento para otros fines, enfatizando que esta organización debería permanecer como una plataforma inclusiva que inspire y active a los militantes, quienes actualmente se sienten desilusionados.

“A veces parece que en cuestión de días cambio de bandos, como si el sábado fuera parte de Junts y el lunes de la CUP”, comentó Llach, reflejando su desconcierto ante la falta de unidad en el movimiento.

Al ser cuestionado sobre la posibilidad de haber evitado las fricciones internas dentro de la ANC, afirmó que si llegar a un consenso significaba sacrificar los principios fundamentales apoyados por la mayoría de su secretariado nacional, entonces la respuesta es un rotundo 'no'.

Por último, en relación con el rechazo de la ANC a unirse al Pacte Nacional per la Llengua, Llach reafirmó la postura de la entidad, señalando: “Ese pacto pretende blanquear la imagen de España y del Gobierno de Illa. En nuestra casa, no tendrán cabida.”