En un ambiente de tensionadas relaciones políticas, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se encontró con la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, en la XXVIII Conferencia de Presidentes celebrada en el Palacio de Pedralbes de Barcelona. Este evento marca un intento por acercar posturas tras recientes desencuentros. También estuvo presente el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, quien ha hecho un llamado a la celebración de elecciones generales.

El Rey Felipe VI llegó puntualmente a las 9:01 horas al Palacio de Pedralbes, donde se lleva a cabo la conferencia, y fue recibido por Sánchez poco antes, a las 8:57 horas. Varias autoridades comenzaron a llegar desde las 8:15 horas, aprovechando el tiempo para intercambiar impresiones y realizar entrevistas con la prensa.

Durante el saludo protocolario, tanto el Rey como Sánchez saludaron a los presidentes de las 17 comunidades autónomas y las dos ciudades autónomas. También se incluyeron en este recibimiento la presidenta del Congreso, Francina Armengol, y el presidente del Senado, Pedro Rollán, además de doce miembros del Gobierno, destacando a las vicepresidentas María Jesús Montero, Yolanda Díaz y Sara Aagesen.

El anfitrión, Salvador Illa, presidente de la Generalitat de Cataluña, estuvo también presente, al igual que otros líderes autonómicos y representantes del Gobierno. Posteriormente, todas las autoridades se reunieron para una fotografía frente al Palacio, un edificio histórico que simboliza la traición del legado cultural y político de la región.

EL ENCUENTRO ENTRE SÁNCHEZ, AYUSO Y PAGE

Durante la ceremonia de saludo, el Rey mostró cordialidad al estrechar manos con todos los presidentes autonómicos, incluido el organizador del evento, Salvador Illa. Sánchez no se quedó atrás y también saludó a Ayuso, a pesar de la controversia surgida en torno a la organización de la conferencia, y a García-Page, quien ha solicitado urgentemente elecciones generales.

El presidente de La Rioja, Gonzalo Capellán, se destacó como el primero en llegar, seguido por el presidente de Ceuta, Juan Jesús Vivas. Es notable la llegada anticipada de la vicepresidenta Sara Aagesen, quien tuvo que aguardar en un rincón para no interrumpir el orden protocolario debido a su temprano arribo.

Luego de los saludos y la foto de grupo, todas las autoridades se dirigieron al interior del Palacio de Pedralbes para disfrutar de un desayuno que les permite establecer diálogos previos al inicio formal de la conferencia.

A pesar de las tensiones que han surgido entre el Gobierno y algunas comunidades autónomas del Partido Popular, que habían amenazado con boicotear el evento, se logró mantener este encuentro esencial. Se esperaba que la inclusión de propuestas por parte de las comunidades resolviera ciertos inconvenientes y se garantizara la presencia de todos los líderes en esta cumbre.

El desayuno precederá una declaración institucional por parte de Sánchez e Illa, marcando la apertura oficial de la conferencia a las 10:30 horas. Cada líder autonómico dispondrá de un tiempo limitado de 10 minutos para discutir 16 temas relevantes, una novedad en esta edición que permite el uso de lenguas oficiales y la presencia de un consejero o consejera como acompañante.

Al finalizar la conferencia, se espera que los líderes regionales ofrecieran ruedas de prensa para expresar sus opiniones sobre los temas tratados, aunque se anticipa que alcanzar acuerdos significativos en cuestiones complejas como la vivienda, migración o financiación podría resultar un desafío considerable.