La comisión de investigación del Congreso, encargada de esclarecer el papel del imán de Ripoll en los atentados yihadistas de 2017 en Barcelona y Cambrils, podría estar más cerca de obtener acceso a información clave para su labor.
MADRID, 25 Sep.
El Gobierno español ha manifestado su disposición a desclasificar la documentación relacionada con los ataques terroristas de agosto de 2017, aunque enfatiza que el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) no tuvo vinculación con dichos sucesos.
Fuentes gubernamentales aseguran que, ante la reactivación de la comisión de investigación en el Congreso, es probable que algunos grupos soliciten acceder a la información en posesión del CNI, dirigido por Esperanza Casteleiro.
El PSOE y Junts están en proceso de negociación para definir el plan de trabajo de este órgano, creado en febrero pero que aún no ha comenzado sus labores.
Estas comisiones, al igual que las que versan sobre la 'Operación Cataluña' y el programa de espionaje Pegasus, surgieron como parte de un acuerdo entre el PSOE, ERC y Junts para tener mayoría progresista en la Mesa del Congreso a partir de agosto de 2023.
Ninguna de las tres comisiones ha comenzado sus investigaciones, pero ahora se busca iniciar el proceso sobre los ataques terroristas y la 'Operación Cataluña', lo cual requiere la aprobación de un plan de trabajo y, en el segundo caso, las comparecencias a llevar a cabo. Para este fin, las dos comisiones se reunirán este jueves.
Esquerra y Junts focalizan su interés en investigar el rol del CNI y la conexión con el imán de Ripoll, así como en los supuestos errores de coordinación de las fuerzas de seguridad y el Ministerio del Interior en relación con el 'cerebro' de los ataques.
La explosión en Alcanar, que marcó el inicio de los ataques, fue inicialmente tratada como un accidente por los Mossos d'Esquadra, que entonces dependían de la Generalitat de Carles Puigdemont. Sin embargo, el enfoque de los partidos aliados del Gobierno apunta a cuestionar la actuación del CNI.
El excomisario José Manuel Villarejo ha sugerido la posibilidad de que el CNI estuviera detrás de los atentados, buscando intimidar al Gobierno catalán, pues mantenía contactos con Es Satty, quien había estado en prisión.
El CNI ha negado cualquier implicación en los ataques y afirma que el contacto con el imán se hizo siguiendo protocolos estándar, sin que este fuera un informante.
Desde el Gobierno se destaca que el CNI no tuvo relación con los ataques y se cuestiona si posee documentos relevantes más allá de información sobre los eventos. En todo caso, no se opondrán a la desclasificación de cualquier material.
El plan de trabajo en progreso entre el PSOE y Junts podría determinar las estrategias para acceder a información clasificada, ya sea a través de desclasificaciones por parte del Gobierno o análisis de datos por la comisión de secretos oficiales del Congreso.
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