Durante meses, su paradero fue un enigma en las provincias de Castellón, Valencia y Tarragona. La búsqueda llegó a su fin y se desveló un oscuro capítulo en la ciudad de Madrid.

El 13 de diciembre, la Policía Nacional informó sobre la detención de una pareja, un hombre y una mujer, en relación con un trágico suceso ocurrido en enero en el barrio de Puente de Vallecas. Esta pareja es sospechosa de estar implicada en la muerte violenta de una mujer que, según los reportes, recibió varios disparos mientras estaba en el interior de un vehículo.

Los presuntos responsables del ataque, que dispararon desde otro automóvil, lograron escapar inmediatamente después de la agresión, eludiendo la justicia y manteniéndose ocultos en diversas localidades españolas durante un periodo considerable.

A raíz de las investigaciones, se determinó que la mujer había estado al volante del coche durante el incidente y que, tras el ataque, ambos abandonaron el vehículo en una gasolinera ubicada en el distrito de Carabanchel, un detalle que fue crucial para las autoridades.

Las primeras indagaciones sugieren que el asesinato podría estar vinculado a rencillas previas entre la familia de la víctima y el supuesto autor, indicando que problemas personales pudieron haber escalado hacia la tragedia.

Finalmente, el 20 de agosto, tras un amplio operativo de localización que abarcó varias provincias, la mujer fue detenida en Castellón bajo los cargos de coautora de asesinato. Posteriormente, tras ser presentada ante el juez, se dictó su ingreso en prisión, marcando un giro significativo en este caso que ha conmocionado a la comunidad.