La jornada del 29 de octubre de 2024 fue recordada con intensidad en la Comunitat Valenciana, donde la delegada del Gobierno, Pilar Bernabé, tomó la palabra para criticar al presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, a quien acusó de intentar modificar la narrativa sobre las inundaciones que devastaron la región.

Durante una conversación en La2 y Ràdio 4, Bernabé no dudó en calificar a Mazón como un actor de la desinformación, afirmando que su postura obstaculiza los esfuerzos necesarios para la reconstrucción. La delegada enfatizó que la falta de colaboración y diálogo por parte del mandatario popular es evidente y perjudicativa para la ciudadanía.

La delegada del Gobierno también abordó la gestión de la alerta de inundación, señalando que la misma debía haberse emitido a las 18:35 horas, en lugar de la hora posterior a la que finalmente se dio. A su juicio, este retraso pudo haber tenido consecuencias fatales, sugiriendo que una notificación temprana podría haber salvado muchas vidas.

Bernabé expresó su indignación al recordar que el Plan Especial de Inundaciones fue activado el 24 de octubre y, sin embargo, las medidas de prevención necesarias no se implementaron con la urgencia requerida. Según ella, esto se tradujo en una "calamidad generalizada" que podría haberse evitado si las decisiones adecuadas se hubieran tomado a tiempo.

Cuando se le preguntó sobre la asistencia de Mazón al funeral de las 229 víctimas de las inundaciones, Bernabé dejó claro que el respeto hacia las víctimas debe primar por encima de cualquier clase de controversia política, dejando entrever su desacuerdo con la presencia del presidente en un evento tan solemne.

Por último, la delegada apuntó a que los proyectos para el barranco del Poio habían quedado obsoletos cuando fueron finalmente reactivados por el Gobierno central. Aseguró que, gracias a estos esfuerzos, las obras de canalización comenzarán a finales de año, marcando un paso importante hacia la mejora de la infraestructura y la seguridad de la región.