En un giro en la política catalana, el secretario general de Junts, Jordi Turull, lanzó fuertes críticas hacia Podemos, acusándolos de implementar un "155 en materia de inmigración" debido a su oposición a transferir esta competencia a Catalunya. Durante una conferencia en Barcelona, Turull se mostró confundido por la postura de la formación morada, que antes se había opuesto al artículo 155 de la Constitución, cuestionando cómo podían ahora adoptar una posición contraria en temas migratorios.

Turull subrayó que la transferencia de competencias en inmigración a Catalunya no es un decreto a favor de Junts, sino una necesidad del Govern de la Generalitat, que debería ser beneficiado por recursos adaptados a las realidades locales, en lugar de depender de la gestión centralizada desde Madrid y de la Guardia Civil. Al respecto, insistió en que la defensa del bienestar de todos los catalanes está por encima de cualquier consideración política.

Asimismo, el líder de Junts expresó su frustración ante la falta de diálogo con Podemos y acusó a su presidenta, Ione Belarra, de no ser transparente en cuanto a las comunicaciones entre ambas organizaciones. Esta situación se agrava por la aparente falta de acción del presidente de la Generalitat, Salvador Illa, a quien responsabilizó de no defender adecuadamente la transferencia de competencias y mantener una actitud pasiva frente a los temores de otros partidos.

Con respecto al PSOE, Turull manifestó su descontento por su interés tardío en el diálogo y por su tentativa de resolver la situación a última hora. Afirmó que Junts no tomará decisiones precipitadas sobre su relación con los socialistas, sino que se espera que se concrete algo antes de las festividades navideñas. “Antes de comer los turrones de Navidad, la resolución estará lista”, declaró con firmeza, dejando entrever la tensión existente.

En el marco de los Presupuestos Generales del Estado, el secretario de Junts dejó clara la postura de su agrupación: no habrá negociaciones sin el previo cumplimiento de compromisos adquiridos. A través de una crítica mordaz, Turull cuestionó la confianza que se puede tener en el presidente Pedro Sánchez en este sentido, replicando con sarcasmo: “¿Me hacen un talón? ¿Es un talón para el presidente Illa, eh?”

A pesar de señalar los presupuestos como una herramienta esencial para la estabilidad, Turull lamentó que no se lograran aprobaciones para 2024 y 2025 y expresó su preocupación por la falta de un proyecto de país claro incluso para 2026. Criticó al Gobierno de Illa por su falta de ambición política y por adoptar una postura resignada en temas cruciales como la financiación y las infraestructuras.

Finalmente, Agustí Arbós, alcalde de Olot, quien presentó a Turull, abordó la cuestión migratoria indicando que, con una población catalana de 8 millones, la situación actual es insostenible si se quiere mantener una sociedad cohesionada y servicios de calidad. Recalcó la importancia de fortalecer la formación profesional en la lengua catalana, un aspecto vital para responder a las demandas del mercado laboral en el futuro.