
En la noche del martes, una tragedia ha sacudido la playa Llarga de Salou, Tarragona, donde dos hermanos británicos, de 11 y 13 años, han perdido la vida ahogados. El padre, quien se encontraba con ellos en el agua, logró ser rescatado y se encuentra a salvo, aunque el evento ha dejado una profunda conmoción en la comunidad.
Los servicios de emergencia recibieron la llamada de auxilio a las 20:47 horas y de inmediato se mobilizaron siete unidades terrestres del Sistema d'Emergències Mèdiques (SEM). Asimismo, un equipo de psicólogos fue despachado para brindar apoyo emocional a la familia afectada, tal como ha informado Protecció Civil en un comunicado oficial.
En la intervención también participaron la Policía Local de Salou, los Mossos d'Esquadra y los Bombers de la Generalitat, que desplegaron cinco unidades en la zona. Esta tragedia se suma a una alarmante serie de incidentes en las playas catalanas, elevando a 16 la cifra de muertes desde que comenzó la campaña estival el pasado 15 de junio. Este número ya supera por cinco a las once fatalidades registradas durante el mismo periodo del verano anterior, lo que resalta la necesidad urgente de reforzar la seguridad en las zonas de baño.
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