El Patronato del Barcelona Centre for International Affairs (CIDOB) ha tomado una decisión que puede marcar un nuevo rumbo para la institución. Este viernes, han propuesto al exalto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, como el nuevo presidente, tras concluir el mandato de Antoni Segura, un destacado historiador que ha dejado huella durante su tiempo al frente.

La elección de Borrell no es casualidad; busca fortalecer el papel del CIDOB en el ámbito internacional. Según un comunicado emitido por el centro de estudios, se pretende consolidar su financiación estructural, un paso esencial para asegurar su operatividad y proyección en un contexto global cada vez más complejo y desafiante.

Borrell, quien ha desempeñado un papel crucial en la diplomacia europea en sus últimos años, está previsto que asuma su nuevo cargo "próximamente". Su experiencia y conexiones podrían ser la clave para elevar aún más la relevancia del CIDOB en temas internacionales.

En una reunión reciente del Patronato, además de su propuesta, se aprobó la incorporación de nuevos miembros que aportarán una valiosa perspectiva a la institución. Se suman a la causa la catedrática de relaciones internacionales e investigadora asociada senior del IBEI, Esther Barbé; el presidente de la Fundación Blanquerna-URL, Josep Maria Carbonell, y el director de la Fundación Rafael Campalans, Pau Solanilla.

El CIDOB no ha dejado pasar la oportunidad de agradecer a Antoni Segura su "compromiso y dedicación" durante los 8 años que ha estado al mando, un período en el que ha enfrentado numerosos retos y ha contribuido a la misión del centro. La transición a una nueva presidencia representa una nueva etapa llena de posibilidades para profundizar en el conocimiento y análisis de los asuntos internacionales en un entorno tan dinámico.