En una notable sesión celebrada el pasado jueves en el Pleno del Parlament, se ha dado luz verde a una iniciativa que busca unir esfuerzos en defensa de los pescadores catalanes. Este movimiento surge tras la reciente aprobación del nuevo plan de pesca de la Comisión Europea (CE), que impone un drástico recorte del 79% en los días de actividad permitida para las flotas pesqueras catalanas.

La votación, en la que se contó con el respaldo de partidos como PSC, Junts, ERC, PP, Comuns y AC, se produjo en el contexto de una moción presentada por Junts. El texto refleja un sólido compromiso por parte de los grupos parlamentarios para apoyar al sector pesquero catalán ante lo que consideran una de las decisiones más significativas que ha tomado el ministro español en el ámbito europeo. La CUP optó por la abstención, mientras que VOX se posicionó en contra de la moción.

En relación con el Plan Plurianual de Pesca, otro de los aspectos abordados en la moción fue la exigencia al Gobierno para que reclame a la CE la derogación del plan actual. Además, se planteó la necesidad de repensar las limitaciones que afectan al sector pesquero, buscando una redistribución "justa y armonizada" de los días y horas de pesca, tomando en consideración las particularidades de cada territorio.

Entre las propuestas también se incluye una asignación del 10% de los ingresos provenientes del impuesto a la energía nuclear, que son de libre disposición, para modernizar y adaptar la flota pesquera catalana. Esta inversión tiene como objetivo asegurar que dicha flota cumpla con las regulaciones europeas. Asimismo, se destinará otro 10% de estos ingresos al sector forestal, evidenciando una preocupación más amplia por la sostenibilidad y el apoyo a la economía local.

Por último, el Parlament ha acordado impulsar la promoción de los productos del sector primario catalán, coincidiendo con la celebración de la Región Mundial de la Gastronomía que Catalunya albergará en 2025. Esta iniciativa busca además estimular el consumo de productos de proximidad, reforzando así la identidad y la economía local en un momento en que las comunidades deben unirse para hacer frente a retos globales.