La Ruta del Cister es una de las rutas más populares de Cataluña, debido a sus impresionantes paisajes y sus hermosos viñedos. La ruta lleva su nombre por los tres monasterios que se encuentran en ella: el monasterio de Poblet, el monasterio de Santes Creus y el monasterio de Vallbona de les Monges.
El Monasterio de Poblet es la joya de la Ruta del Cister. Fundado en el siglo XII, es uno de los monasterios cistercienses más grandes de España. Su impresionante arquitectura y rica historia hacen de él un lugar muy especial.
Al visitar el Monasterio de Poblet, podrás pasear por sus hermosas galerías, visitar la iglesia y admirar sus magníficas tumbas reales. También te recomendamos que explores la biblioteca, que alberga una colección de manuscritos y libros antiguos de gran valor. Si te apetece algo más activo, puedes hacer una caminata hasta la cima de la montaña que se encuentra detrás del monasterio. Desde allí podrás disfrutar de impresionantes vistas del monasterio y sus alrededores.
El Monasterio de Santes Creus es otro de los monasterios de la Ruta del Cister. Este monasterio data del siglo XII y cuenta con una arquitectura impresionante. Cuando visites el monasterio, no te pierdas la oportunidad de admirar el claustro, la iglesia y su impresionante campanario.
Además, Santes Creus cuenta con una hermosa plaza medieval en el centro de la ciudad, donde se encuentra la iglesia de Santa Maria. Pasea por las calles empedradas y descubre la historia de esta ciudad.
El Monasterio de Vallbona de les Monges es uno de los tres monasterios de la Ruta del Cister y el único monasterio femenino cisterciense en Cataluña. Aunque su importancia histórica es menor respecto a los otros dos monasterios, su belleza e impresionante arquitectura hacen de él un lugar que no debes perderte.
El monasterio cuenta con numerosos elementos arquitectónicos de interés, como la iglesia, el claustro y la sala del capítulo. Además, en Vallbona de les Monges podrás disfrutar de su privilegiada ubicación, ya que está situado en la cima de una colina que ofrece unas vistas espectaculares del valle y de los viñedos que la rodean.
Llegar a la Ruta del Cister es sumergirse en un paisaje lleno de viñedos. Una vez que estés allí, no puedes perderte los recorridos por las bodegas y los viñedos, donde podrás degustar los mejores vinos de la región. La mayoría de las firmas vinícolas ofrecen visitas guiadas y degustaciones de vino, donde podrás descubrir las variedades y sabores de cada uno de ellos.
Otra opción interesante es hacer una ruta en bicicleta por los viñedos. Se trata de una experiencia única que te permitirá disfrutar de la naturaleza y la tranquilidad de la zona mientras degustas los vinos más destacados de la región.
La Ruta del Cister es una de las rutas más bellas de Cataluña, que combina la historia, la cultura y la naturaleza. Recomendamos que visites tanto los monasterios como los viñedos, para que puedas experimentar todo lo que el área ofrece. ¡Disfruta de la belleza y el encanto de la Ruta del Cister!