En una entrevista concedida a Rac1, el exsecretario general de Junts, Jordi Sànchez, ha defendido la decisión de suspender temporalmente en 2020 al exportavoz del partido en la Cámara catalana, Eduard Pujol, por presuntos delitos de agresión sexual. Sànchez ha afirmado que esta medida se tomó tras un informe interno de "contundencia extrema".
Además, Sànchez ha destacado que solicitó brindar apoyo a las víctimas y al mismo tiempo evitar que los hechos se hicieran públicos, para que Pujol pudiera tener una defensa sin "comunicación pública". La decisión se tomó poco antes de que Sànchez ingresara en prisión y recibió el informe mientras cumplía condena por la sentencia del 'procés', durante un permiso de salida en el que le resultaba difícil contrastar toda la información.
En este sentido, Sànchez ha enfatizado que, ante descripciones tan contundentes y claramente delictivas, era necesario tomar medidas preventivas.
Por otro lado, la abogada de Pujol reveló en una entrevista en Rac1 que una de las dos personas que denunciaron presuntas agresiones sexuales por parte del político se retractó, admitiendo que no fue objeto de acoso por parte de Pujol.
La dirección de Junts decidió suspender provisionalmente la militancia de Pujol en octubre de 2020, pero posteriormente lo reincorporó al no haber denuncia formal por vía judicial, pidiendo disculpas públicas al exportavoz.
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