El departamento de Justicia de la Generalitat impuso medidas cautelares al expolicía Albert López, condenado por el crimen de la Guardia Urbana. Sin embargo, se ha destacado que estas medidas no tienen el mismo alcance que las impuestas a la expolicía Rosa Peral.
Según los técnicos de la junta de tratamiento de la prisión de Mas d'Enric, la sobreexposición mediática relacionada con la actividad delictiva perjudica el proceso de reinserción de Rosa Peral. Esto fue explicado por la consellera de Justicia, Derechos y Memoria de la Generalitat, Gemma Ubasart, durante una rueda de prensa.
Ubasart señaló que el martes se abrió un expediente sancionador a Peral después de verificar un mal uso de las comunicaciones personales. La junta de tratamiento también ha valorado esta situación de manera unánime.
La consellera resaltó que la decisión de imponer estas medidas se basa en razones técnicas y aseguró que el departamento respeta los procedimientos y el reglamento penitenciario.
Asimismo, Ubasart afirmó que los presos tienen derecho a comunicarse con los medios de comunicación y dar entrevistas, pero deben hacerlo dentro de la prisión y por escrito, sin grabaciones audiovisuales.
Por su parte, el secretario de Medidas Penales, Reinserción y Atención a la Víctima, Amand Calderó, detalló que Albert López también ha recibido una medida cautelar similar, aunque de menor alcance, ya que no ha tenido ninguna comunicación con el exterior.
Calderó enfatizó que no se trata de una medida preventiva, sino que existe algún indicio que aconseja tomar esta decisión. Sin embargo, no se proporcionaron más detalles debido a la intimidad del penado.
Se ha indicado que ambas decisiones pueden ser recurridas y llevadas ante un Juzgado de Vigilancia Penitenciaria. El tiempo que tardarán en volverse firmes dependerá de este proceso.