El PSOE y sus aliados necesitan mayoría absoluta en el Congreso para levantar el veto del Senado: no caben errores ni ausencias

MADRID, 29 de mayo.

Este jueves, la Ley de Amnistía se enfrenta a su última votación en el Pleno del Congreso, donde se requiere mayoría absoluta (al menos 176 diputados) para levantar el veto del Senado. Si no hay sorpresas, la norma podría estar en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el viernes o el sábado para entrar en vigor.

Esta "Ley Orgánica de amnistía para la normalización institucional, política y social en Cataluña" surge de los acuerdos que el PSOE selló con ERC y Junts a cambio del respaldo de los independentistas a la investidura del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

Su propósito es amnistiar a todos los involucrados en movilizaciones soberanistas e independentistas desde el 1 de noviembre de 2011 hasta el 13 de noviembre de 2023. Incluye a los condenados por la consulta del 9 de noviembre de 2014 y los del referéndum independentista de 2017, así como el archivo de las investigaciones por los disturbios tras la sentencia del Tribunal Supremo.

La proposición de ley fue presentada por el Grupo Socialista el 13 de noviembre del año pasado y, aunque se ha tramitado con urgencia, no verá la luz hasta más de seis meses después.

Si no hay sorpresas de último momento, será la segunda ley aprobada por el Parlamento desde que asumió el Gobierno de Pedro Sánchez en diciembre pasado, tras la de Enseñanzas Artísticas y la reforma constitucional para eliminar el término disminuido de la Carta Magna.

Durante su proceso en el Congreso, el texto ha sido modificado en virtud de los acuerdos alcanzados por los socialistas con los independentistas catalanes, con el apoyo de los demás socios parlamentarios.

Tras el debate en la Comisión de Justicia, el texto fue llevado al Pleno el 30 de enero, pero el rechazo de Junts impidió su envío al Senado. Los de Carles Puigdemont forzaron su regreso a la comisión debido a desacuerdos con el PSOE y tuvieron que buscar un nuevo pacto.

El acuerdo final se alcanzó en el Pleno del 14 de marzo y la ley fue enviada al Senado. El PP utilizó su mayoría en la Cámara Alta para demorar la norma, pese a tramitarse con urgencia. Además, el Senado consideró que la ley implicaba una reforma constitucional encubierta, pero finalmente desistieron de llevar el asunto al Tribunal Constitucional.

Así, hace dos semanas, el Senado vetó la ley y la devolvió al Congreso sin cambios. El Pleno del Congreso la debatirá este jueves en una sesión especial, donde los portavoces tendrán siete minutos para intervenir. La votación, solicitada por el PP, será nominal.

El Gobierno necesita mayoría absoluta para levantar el veto del Senado, con el PSOE y sus aliados no pudiendo cometer errores ni ausencias ante la oposición de PP, Vox, UPN y CC.

El líder de Esquerra (ERC), Oriol Junqueras, y el secretario general de Junts, Jordi Turull, ambos condenados y luego indultados, asistirán al Pleno del Congreso este jueves.

El PSOE aborda el debate final sobre la Ley de Amnistía convencido de que no le causará desgaste electoral, considerando la cuestión como "amortizada", según fuentes socialistas.

A pesar de la tensión inicial, la dirección del PSOE cree que el debate está superado, especialmente después de los resultados de las elecciones catalanas del 12M.