La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha decidido frenar la adquisición del Institut de Radiofarmacia Aplicada de Barcelona (IRAB) por parte de Curium Pharma Holding Spain. Según el organismo regulador, la transacción presenta "riesgos insalvables" que amenazan la competencia en un mercado crítico para la salud.

Este lunes, la CNMC emitió un comunicado en el que detalla que la operación afectaría a los mercados de radiofármacos PET, utilizados en pruebas para la detección de cáncer, así como a los servicios de fabricación a terceros en este sector. A su juicio, la fusión podría llevar a un incremento de precios y una disminución de la diversidad de productos disponibles en la región noreste de España.

La preocupación de la CNMC no se limita solamente a los precios; también se vislumbra un aumento en las barreras de entrada para nuevos competidores y una posible desaparición del único operador con ciclotrón independiente que ofrece servicios de fabricación de radiofármacos PET. Esto podría limitar severamente la competencia en el sector, según advirtieron los expertos del organismo.

A pesar de que Curium presentó ciertas propuestas de compromiso para mitigar estos problemas, la CNMC encuentra que estas son "insuficientes y poco efectivas". De facto, el organismo sostiene que no existen condiciones adecuadas que permitan solucionar las preocupaciones identificadas en torno a esta fusión.

La decisión de la CNMC aún no es definitiva. Será comunicada al ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, quien evaluará si es apropiado llevar el asunto al Consejo de Ministros. Este último podría revisar la operación bajo criterios de interés general que puedan ir más allá de la defensa de la competencia.

Para fortalecer su análisis, la CNMC colaboró estrechamente con la Autoritat Catalana de la Competència (ACCO), que ya había resaltado en un informe no vinculante la existencia de "riesgos significativos" para la competencia derivados de la concentración empresarial en cuestión.