El presidente del Puerto de Barcelona, Lluís Salvadó, ha asegurado que se debería aplicar un "impuesto razonable" a las emisiones de los grandes buques. Afirmó que "el problema de la contaminación no son los cruceros" en la infraestructura, ya que son las naves más modernas que llegan al enclave. Salvadó ha explicado que otros tipos de barcos como los petroleros y los graneleros son más antiguos y generan más emisiones. Ha anunciado su voluntad de constituir un consejo para la sostenibilidad de los cruceros que permita gestionar las externalidades negativas que producen los cruceristas y maximizar las positivas.

Ha respondido a las preguntas de Montserrat Vinyets, diputada de la CUP, que ha pedido esclarecer los proyectos para reducir el impacto de este turismo en Barcelona, y al representante de los Comuns David Cid, que ha reclamado limitar el número de cruceristas a un máximo de 10.000 al día. Salvadó ha mencionado que el consejo deberá analizar dónde y cuándo se producen las congestiones de cruceristas en Barcelona y ha abierto la puerta para "informarles de que no podrán ir a ciertos lugares" de la ciudad.

El diputado del PSC Jordi Terrades ha asegurado que Barcelona debe ser el puerto base de salida de los cruceros y que los buques estén un tiempo "razonable" que permita captar turismo de más calidad y que aporte más valor añadido. Ferran Estruch de ERC ha apuntado que no puede haber un crecimiento sin límites y que debe ser de calidad y teniendo en cuenta la sostenibilidad.

Salvadó ha explicado que el impuesto a las emisiones a los grandes buques que está estudiando la Generalitat debe ser un "impuesto razonable" y que debe evitar la deslocalización de la llegada de buques, ya que un barco procedente de China tiene muy pocos problemas para cambiar de puerto de llegada. Ha recordado que si la tasa provoca un cambio del puerto de llegada, aumenta las emisiones del transporte por carretera.

Ramon Tremosa, diputado de Junts, ha apuntado que este impuesto "no tiene que reducir la competitividad y debe evitar deslocalizaciones de empresas", por lo que se debe hacer pero limitando los efectos no deseados. Por su parte, el representante de Vox, Andrés Bello, ha preguntado sobre los cambios que ha habido en la gestión del Puerto de Barcelona entre la presidencia de Salvadó y la de su antecesor en el cargo, Damià Calvet.